Por ello, la mejora y el control de procesos son básicos para la correcta gestión empresarial y así conseguir los siguientes objetivos:
- Conseguir un mejor flujo de información y materiales.
- Obtención de importantes incrementos de la productividad.
- Disminución de los tiempos de proceso del producto o servicio.
- Disminución de los costes de las actividades y productos.